Debate sobre el Santuario de Ballenas en el Atlántico Sur: Pesquerías Latinoamericanas en Riesgo
En la 69ª reunión de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), que se celebra esta semana en Lima, Perú, se discute nuevamente la propuesta de creación del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur (SAWS). La iniciativa, que ha sido rechazada en 12 ocasiones previas, busca proteger a los cetáceos prohibiendo la caza en una vasta área que abarca desde el ecuador hasta el Cabo de Hornos, y desde Sudamérica hasta África Occidental. Sin embargo, esta propuesta ha generado un intenso debate entre los países miembros de la CBI, especialmente en América Latina, donde las pesquerías locales podrían verse gravemente afectadas.
Impacto en la Economía y Soberanía de América Latina
El IWMC World Conservation Trust, una organización internacional que promueve el uso sostenible de los recursos marinos, ha manifestado su preocupación por los efectos económicos y sociales que podría tener el SAWS en las comunidades costeras de la región. Según su presidente, Eugene Lapointe, imponer restricciones a la explotación de recursos marinos en estas zonas podría perjudicar a las pesquerías locales que desempeñan un papel clave en la seguridad alimentaria regional.
“Las pesquerías en América Latina han gestionado de manera sostenible sus recursos por años. Restringir actividades en un santuario tan extenso no solo afectará la caza de ballenas, sino también otras formas de uso responsable de los recursos marinos, lo cual sería contradictorio para países que han promovido activamente la Economía Azul", afirmó Lapointe.
Desafíos para la Soberanía Regional
Otra preocupación radica en la soberanía de los países latinoamericanos sobre sus Zonas Económicas Exclusivas (ZEE). Los críticos de la propuesta temen que el santuario imponga limitaciones sobre la gestión de los recursos marinos en estas áreas, socavando la autonomía de las naciones de la región. Quienes se oponen sugieren que, en lugar de respaldar esta iniciativa internacional, los países latinoamericanos deberían fortalecer sus propios programas de conservación regional, como el Proyecto del Gran Ecosistema Marino del Caribe (CLME+) y el Fondo para el Arrecife Mesoamericano, ambos enfocados en promover el uso sostenible y la conservación de la biodiversidad marina.
Un Proyecto Controversial
Si bien el objetivo del SAWS es proteger las ballenas de la caza indiscriminada, muchos expertos argumentan que la Comisión Ballenera Internacional ya cuenta con medidas de conservación eficaces que han demostrado ser suficientes para proteger a las especies más vulnerables. Estas medidas incluyen moratorias sobre la caza comercial de ciertas especies de ballenas y la implementación del Procedimiento de Gestión Revisado (RMP), que establece límites sostenibles de captura. Con este marco en funcionamiento, la creación de un santuario adicional podría considerarse innecesaria.
La Votación Decisiva
La reunión de la CBI en Lima pondrá una vez más sobre la mesa esta propuesta que ha estado en debate por más de dos décadas. El resultado de la votación tendrá implicaciones no solo para la conservación de las ballenas, sino también para las economías locales de América Latina, que dependen del uso sostenible de los recursos marinos. Los representantes de los países miembros de la CBI deberán sopesar cuidadosamente los beneficios y riesgos antes de tomar una decisión que afectará a millones de personas en la región.
La creación del Santuario de Ballenas del Atlántico Sur es un tema complejo, donde los intereses económicos, ambientales y políticos están en juego, y cuyo desenlace en Lima podría tener repercusiones significativas para el futuro de las pesquerías y la conservación marina en América Latina.