El teléfono inteligente será en el futuro como un brazalete flexible

En el futuro, el teléfono inteligente se verá como un brazalete flexible, con pantalla totalmente curva y que podrá mostrar distintos contenidos, según como se oriente la mano. Para que esto pueda suceder no solo las pantallas deben de ser flexibles, sino algunos componentes internos también, como memorias o baterías.

La posibilidad de poder curvar una pantalla de televisor, por ejemplo, ya es posible gracias a la creación de la tecnología OLED (diodo orgánico de emisión de luz), en la cual los distintos colores luz se producen en cada pixel tras la estimulación eléctrica de una capa electroluminiscente. Otro de gran importancia es la batería, y hacer que esta se pueda doblar también es un desafío.

La Universidad de Stanford tiene a sus científicos  trabajando en una batería con ánodos de iones de aluminio que es de carga rápida y tiene un ciclo de vida mayor. Este tipo de desarrollos ha abierto el camino a la era de los dispositivos móviles verdaderamente flexibles, señaló Venkat Viswanathan, ingeniero mecánico de la Universidad Carnegie Mellon y especialista en tecnología de baterías.

Entre tanto, el Instituto de Ciencia y Tecnología Avanzada de Corea creó una memoria RAM ultra flexible con la capacidad de leer, escribir y retener datos.